Hace 3 años que la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció el síndrome de desgaste ocupacional como una enfermedad profesional. Estamos hablando de un tipo de trastorno que es consecuencia directa de un estrés laboral continuado. Por aquel entonces nada menos que el 27% de los trabajadores de nuestro país ya corría un riesgo grave de padecerlo, según datos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), y no aún no teníamos ni idea de lo que se nos venía encima.
Tras una pandemia que no solo nos ha creado gran temor e incertidumbre en lo relativo a nuestra salud, sino también por nuestra economía y puestos de trabajo, una continua escalada en los precios de las energías básicas y una guerra que está afectando directamente a nuestros bolsillos, estas cifras se han disparado. Actualmente más de la mitad de los españoles en activo reconocen sufrir estrés relacionado con el trabajo y todo un 75% afirman vivir inmersos en una cultura donde siempre deben estar disponibles laboralmente.
Pero debemos ser conscientes que este síndrome de desgaste profesional, también conocido como síndrome de burnout o síndrome del trabajador quemado, es solo la punta visible de un enorme iceberg. Esconde una cronificación generalizada del estrés laboral que de no ser atajada a tiempo puede conllevar consecuencias sobre nuestra salud y calidad de vida.
Por estos motivos resulta imprescindible que, de una vez por todas, no prioricemos el trabajo sobre nuestro bienestar personal, descanso y cuidado. También resulta necesario que conozcamos las señales de aviso del estrés laboral para poder identificarlo a tiempo, así como la importancia de pedir ayuda terapéutica profesional lo antes posible.
Pero, ¿Qué es el estrés laboral?
El estrés es una reacción natural de nuestro organismo ante una situación que requiere de nuestros recursos. Nos permite activarnos y afrontar lo que está sucediendo. Por lo tanto, es beneficioso, adaptativo y necesario para nuestro día a día. Sin embargo, esta sociedad frenética en la que vivimos, de cambio constante, inmediatez, prisas y miles de exigencias (externas e internas), es el caldo de cultivo perfecto para que experimentemos un estrés frecuente, excesivo y duradero que deja de favorecernos para empezar a restarnos salud.
En muchas ocasiones este tipo de estrés está causado por factores de nuestro propio trabajo, como pueden ser una alta demanda de recursos, tareas o funciones que nos hacen sentir que que no podemos afrontarlos y nos generan un alto grado de ansiedad y frustración. En este caso estamos hablando de estrés laboral, una situación que no solo afectará a nuestra vida laboral, sino incluso a nuestra salud y relaciones sociales.
¿Cómo podemos darnos cuenta de que el estrés laboral nos está afectando?
Los síntomas asociados al estrés laboral son diversos y suelen variar de una a otra persona, pero es importante conocerlos para identificar si realmente estamos en esta situación.
Apatía, agotamiento físico, falta de concentración, insomnio, irritación, intolerancia o impaciencia, inseguridad y falta de autoconfianza suelen ser los primeros síntomas de este tipo de estrés. Pero al poco tiempo se pueden ver acompañados de otros de carácter más físico, como taquicardias, contracturas, dolores de cabeza, sensación de falta de aire o problemas gastrointestinales y dermatológicos.
Además, la pandemia ha supuesto un antes y un después en el padecimiento de síntomas de agotamiento en lo que a salud mental se refiere, incluyendo el trabajo online como un posible detonador de nuevos síntomas asociados al estrés laboral, convirtiéndose así el teletrabajo en un arma de doble filo si no lo ejercemos correctamente y no escuchamos las sensaciones negativas que puede estar causándonos una mala práctica del mismo.
Todos estos síntomas pueden derivar en trastornos graves de ansiedad o depresión. Por esta razón, si crees que sufres de estrés laboral, o conoces a alguien que pueda padecerlo, es necesario recurrir a terapia psicológica. Existen diversos métodos para gestionar y controlar el estrés laboral, pero debes tener en cuenta que cuanto antes cuentes con ayuda profesional, más cercana tendrás tu recuperación.
Si buscas una solución a tus problemas de estrés, o quieres informarte sobre nuestras terapias, ponte en contacto con nosotros. Nos puedes localizar en el teléfono 659292692, en el correo contacto@garnelopsicologia.com o a través de nuestra página web. Estamos para ayudarte.